La excursión al Valle del Baztán y cueva de Zugarramurdi nos hace viajar a otra época. Podemos salir de Pamplona con un sol radiante y al llegar al Valle del Baztán encontrarnos con las nieblas que se agarran con fuerza a los valles del norte de Navarra durmiendo casi todas las noches en sus ríos y bosques arropando al Basajaun, a las Lamias, a las brujas y a todos los seres que se encuentran cómodos en este ambiente de poca luz proclive al misterio, al temor, a las leyendas y a creencias profanas.