EXCURSIONES A LA NAVARRA TRANQUILA DESPUÉS DEL BULLICIO DE SAN FERMÍN.

Una excursión por la Selva de Irati, por el Valle del Baztán, por las Bardenas Reales, por el Nacedero del Urederra, por la Foz de Lumbier, o un viaje para visitar las cuevas de Zugarramurdi,  el pueblo de Ujué, el Momasterio de Leyre, Ochagavía o las murallas de Artajona, es a su vez hacer un tour por la tranquilidad, la paz, el aire limpio y el silencio solo roto por el hipnótico ruido del agua de los ríos, el canto de los pájaros o la música que hacen los cencerros de las ovejas, vacas o caballos.

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El río Irati a su paso por la Foz de Lumbier

Navarra es tierra de grandes contrastes y en poca distancia podemos pasar de los verdes valles del Valle del Baztán y los frondosos bosques de la Selva de Irati a la bella desolación que se siente en la rojiza tierra del desierto de las Bardenas Reales.

En estos días de fiestas de San Fermín surge otro contraste, el del festivo, bullicioso y ruidoso escenario en que uno se ve envuelto si viaja a Pamplona, a la tranquilidad absoluta que se puede respirar cuando haces una salida desde Pamplona a alguno de los muchos lugares con encanto que tiene Navarra.

Bien lo sabía Ernest Hemingway, quien después de disfrutar a tope de San Fermín, hacía un relajante retiro hasta las orillas del río Irati en busca de truchas, buena gastronomía y tranquilidad donde encontrar la inspiración para escribir el libro «Fiesta», el cual dio a conocer a Pamplona y a San Fermín en todo el mundo. Sin duda tuvimos la suerte de que vendría a visitar Navarra uno de los mejores «influencer» de la época.

«Lo mas parecido al cielo, o al más allá, podrían ser los días que pasamos juntos en el Valle del Irati.»

Ernest Hemingway